Por César Martínez, MAS Consulting USA

En San Antonio Texas, ciudad fundada por una expedición de canarios en 1691 y bautizada en nombre de San Antonio de Padua, por lo general no pasan muchas cosas. Es la séptima ciudad más grande de los Estados Unidos, pero con un ambiente muy tranquilo y familiar. Aquí se libró la batalla del Álamo, que dio paso a la Independencia de Texas al grito de «Remember de Alamo». También se firmó el histórico Tratado de Libre Comercio de Norteamérica entre los Estados Unidos, México y Canadá.

Por lo general las noticias de San Antonio que logran interés nacional casi siempre son relacionadas con los partidos de baloncesto, ya que tenemos un gran equipo, los Spurs, pero en éste proceso electoral tan histórico, San Antonio, puede convertirse en el epicentro que decida quién es el candidato o candidata del partido Demócrata y del triunfo definitivo de John McCain. Por el lado Demócrata, ambos han estado constantemente visitando la ciudad en eventos con miles de personas. El viernes tuvieron presentaciones casi simultáneas en ésta ciudad, y éste lunes Obama ha vuelto.

También hemos tenido la visita de los candidatos Republicanos y aunque es casi ya un hecho consumado que el Senador McCain será el candidato del partido Republicano, más tarde llegará a la ciudad para juntarse con veteranos y pasar la noche aquí. El ex gobernador Huckabee también estuvo presente la semana anterior en el mismísimo Alamo y vuelve ésta noche, aunque por el reducido tamaño de la concurrencia a su evento se puede notar que Texas y Ohio serán ya sus últimas contiendas, salvo que ocurra un milagro. En estas últimas dos semanas, hubo un desfile de luminarias políticas, el ex-presidente Bill Clinton, el Senador Ted Kennedy y varios más que vinieron a poner su granito de arena o tal vez a rezarle a San Antonio de Padua para que les conceda el milagro de la candidatura. Para ellos puede venir bien la oración a San Antonio que reza así:

¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. ¡Oh Glorioso San Antonio! Pues las cosas perdidas son halladas por vuestra mediación y obráis tantos prodigios con vuestros devotos; yo os ruego y suplico me alcancéis de la Divina Majestad el recobrar la gracia que he perdido por mis pecados, y el favor que ahora deseo y pido, siendo para Gloria de Dios y bien de mi alma. Amén.

Este súper martes 2 veremos por quién se inclina San Antonio.