Emili J. Blasco, corresponsal de ABC en Londres, publica hoy el siguiente artículo.

Gordon Brown copia frases de Bill Cinton y Al Gore

«Este es el siglo en el que nuestro país no puede permitirse desperdiciar los talentos de nadie», dijo Gordon Brown el lunes pasado en su discurso en el congreso laborista. «Cuando entramos en el siguiente siglo, todo el mundo importa; no hay nadie a quien desperdiciar», dijo Bill Clinton en su mensaje sobre el Estado de la Unión en 1995.

Otro botón de muestra. «Esta es mi promesa al pueblo británico: no os defraudaré», concluía Brown en su intervención del lunes. «Os prometo esta noche: trabajaré por vosotros cada día y nunca os defraudaré», aseguró Al Gore en la aceptación de la nominación para la carrera presidencial de 2000.

No es que el primer ministro británico se dedique a subrayar discursos pasados de Clinton y Gore para luego copiar sus frases más felices, sino que cuenta entre sus asesores políticos con Bob Shrum, que también trabajó para esos dos dirigentes estadounideneses. O Shrum recurre siempre que puede a los mismos pasajes porque le falta imaginación, o es que los considera especialmente útiles en el ejercicio de oratoria.

Frases gemelas

El paralelismo fue destacado ayer por «The Times», que también incluía algunos otros ejemplos. «A veces la gente dice que soy demasiado serio y que lucho demasiado duro, y quizás es cierto» (Gordon Brown); «conozco mis imperfecciones. Sé que a veces la gente dice que soy demasiado serio, que mis palabras tienen demasiada sustancia y política» (Al Gore). «No hay debilidad hoy en el Reino Unido que no pueda ser superada por la fuerza del pueblo británico» (Brown); «no hay nada malo en América que no pueda ser curado con lo que hay de bueno en ella» (Clinton). Según el citado periódico británico, Brown incluso ha copiado la estructura de los discursos que suele preparar Shrum, que casi siempre comienzan con una anécdota sobre algo que el orador ha aprendido de sus padres, y también mencionan algún héroe sobre el que la población se siente orgullosa (Brown aludió a John Smeaton, mozo de equipajes que se enfrentó a los terroristas que quisieron hacer estallar un coche en Glasgow este verano; los estadounideneses suelen invocar a sus soldados).

La similitud ha sido advertida por los conservadores, que se la tienen jurada a Bob Shrum desde que el año pasado pronunciara una conferencia titulada «Cameron plagia a Bush», en la que señalaba lo que a su juicio era un intento del líder «tory», David Cameron, de copiar algunas cosas del presidente norteamericano.

Los «tories» también señalan que Shrum no ha hecho ganar las elecciones presidenciales a ningún candidato para los que ha trabajado, pues no lo logró con Al Gore ni con John Kerry. Y en el caso de Bill Clinton, trabajó para él en diversas ocasiones, pero no en sus exitosas campañas de 1992 y 1996.